La rinomodelación es un procedimiento estético no quirúrgico que utiliza rellenos dérmicos para mejorar la forma y el perfil de la nariz. Mediante inyecciones de ácido hialurónico u otros materiales de relleno, se pueden corregir imperfecciones, como el caballete nasal, la punta caída o asimetrías, proporcionando una apariencia más armoniosa sin la necesidad de cirugía.
Proporciona una mejora visible en la forma de la nariz de manera inmediata, sin el tiempo de recuperación asociado con la cirugía.
Al ser un tratamiento no quirúrgico, evita las complicaciones y el tiempo de recuperación prolongado de la rinoplastia, permitiendo volver a las actividades cotidianas casi de inmediato.
Permite realizar pequeños ajustes y perfeccionar los resultados en citas posteriores, logrando una nariz que se adapta perfectamente a las proporciones faciales del paciente.
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